jueves, 25 de abril de 2019

Domingo de Resurrección

La lluvia se apaciguo después de una treintena de litros durante los pasados días.

A la hora de las 11.30 convenida para la celebración el domingo, se recibió una llamada del párroco José Antonio que se sentía indispuesto para celebrar todas las misas de los pueblos para ese día, y es que era debido a un dolor que padecía en la mano.

Como ovejas descarriadas, en el buen sentido de la palabra, y sin líder espiritual, se decidió esperar un poco y realizar al menos la procesión y retirada del manto de la Virgen, a pesar de no tener cura.

Servidor se propuso como capellán por los 8 años de monaguillo, pero no fue necesario, las buenas mujeres realizaron los cánticos y salves correspondientes estupedamente.

Por lo que la tradicional retirada del luto a la Virgen continúo como hace siglos hecho por nuestras antepasados.

Que Dios protega a la que retiró el manto.





























No hay comentarios:

Publicar un comentario