Segunda Semana Santa con fronteras autónomicas cerradas

Debido a las medidas de COVID 19, los que se encuentren fuera de la provincia de Soria no podrán acercarse a pasar unos días en Almazul y pueblos sorianos.

Los que vivamos en Zaragoza tendremos que aguantar esas restricciones y quedarnos en casa.

Muchas veces he pensado qué hubiera ocurrido si Soria hubiera sido la cuarta provincia de Aragón, por lo menos ahora  habría libertad de movilidad a nivel de comunidad autónoma.

Resulta paradójico cómo una línea imaginaria puede marcar tanto, como una barrera entre dos mundos, en vez de una simple frontera entre dos territorios amigos.

Al final poder volver al pueblo con plena libertad se va a convertir en un vía Crucis.

El problema será cuando contemos a nuestros nietos lo que hemos pasado, y nos mirarán extrañados de unas medidas que no tienen mucho sentido común. Cuando un europeo podía viajar a Baleares o Canarias, y un zaragozano no podía ir a Almazul. O como obligan a ir con mascarillas, y el director Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitaria en un programa de TV dice tan campante que no tiene mucho sentido usarlas. O que en plena naturaleza tengas que llevar la mascarilla, pero si están fumando y enviando aerosoles repletos de Covid al aire, no hay problema. 

Al final los políticos hacen como Pilatos y se lavan las manos, y no como signo de limpieza.

Siempre estamos negando la evidencia, pero ya lo hizo Pedro con su no es no (Sanchéz no, si no el díscipulo). Menudo calvario nos espera con tantas elecciones y desatinos.

Se puede decir que en el pecado va la penitencia y tenemos que pagar por nuestros pecados.

Mientras tanto se habla de Rocío y Salvamé, para así no hablar del descontrol de las vacunas y la mala gestión de la pandemia. Pesada cruz tenemos que cargar en estos tiempos. Buenas cortinas de humo. Que Dios nos pille confesados, porque el castigo sí va a ser eterno, sobretodo a los autonómos que viven en un infierno continuo. 

Nos tienen muy bien apaciguados con el Netflix y así no montar un cristo, si es  que somos en el fondo todos unos torrijas.

Algún Judas ha traicionado o corrompido y se lo ha llevado calentito con sus comisiones, ya veremos si son juzgados.

La culpa no es del pueblo, por que una vez ya clamó por soltar a Barrabás (y eso que era un asesino) en vez de a Jesuscristo. Que fácil nos manipulan para seguir sus caminos.

 

En cuanto a las cuestiones terrenales, estamos a la espera que nos confirme el cura José Antonio si va a ver algún oficio a lo largo de esta Semana Santa.

Cuando se sepa, se colgará en el blog inmediatamente.

Tendremos que esperar otro año para celebrar todos en Almazul la Semana Santa, así que toca resignación, eso sí, la procesión va por dentro. ¡Ah! ¡Felices Pascuas! que lo importante a veces se nos olvida.