Una costumbre muy arraigada en los pueblos castellanos es la bendición de campos, es decir, la Cruz de Mayo.
Todos los agricultores van a pedir que el tiempo sea graciable con ellos y se bendicen los campos, al ser año par, toca en la cruz que hay cerca del desvío a Zárabes.
Que aquellos que haya puesto todo su empeño, tiempo y cariño, que han sembrado su semilla, tenga frutos y obtengan su cosecha, porque realmente habrá merecido la pena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario